Buenas!
Hoy os voy a hablar de un sitio que ayer me sorprendió una barbaridad. Un compañero de trabajo me dijo, vente a tomar una cerveza a Sanchinarro y yo dije ok, vale, nos tomamos una cerveza. A lo que él me contestó, te aviso que el sitio es peculiar, es un kebab ruso, en el que ponen cervezas rusas. Me sorprendió muchísimo y lo primero que pensé fue, dónde me va a meter este tío, un kebab ruso.. ¿no suelen ser turcos?. ¿cerveza rusa?
Pues nada, hoy os voy a hablar del restaurante Arca de Noé del tipo restaurante falafel (kebabs), en la calle Príncipe Carlos , esquina C\ Alcalde Conde de Mirasol
Cualquiera que esté leyendo hasta ahora dirá, pero este se ha vuelto loco escribiendo de un kebab. Seguid leyendo.
No os voy a decir que es un restaurante 5 estrellas, porque mentiría pero me quedé “flipado” porque es el típico sitio que no te imaginas, que es un descubrimiento y al que merece la pena volver.
En primer lugar, el sitio es más grande que el típico Kebab que conocemos, que por lo que yo he visto, suelen ser sitios muy pequeños, estrechos incluso, en el que comer resulta pelín incómodo. Pues no, este sitio tiene mesas en plan banco – mesa – banco, en la que caben 5 sin problemas (demostrado ayer, que éramos 5 y grandecitos). También tienen mesas normales, aunque son más pequeñas y caben 3-4 personas nada más.
Otro aspecto reseñable del local es que no sales apestando a comida, que es algo que también te imaginas que puede pasar si pasas mucho rato en un sitio de kebab. Además de no salir apestando, en el local se está a gusto y no hay “olores”.
El servicio, normal, bueno incluso. Están pendientes, sin pasarse, pero te sirven e forma rápida y bien. El camarero, por cierto, muy simpático.
Además del local, lo más sorprendente es la cerveza rusa Baltika, con 9 tipos diferentes de cerveza, numerados del 1 al 9. Cada número indica un tipo diferente de cerveza (4 = cerveza tostada, 8 = cerveza de trigo, por ejemplo). Excelentes las cervezas, por cierto. Nunca las había probado y son muy buenas. Las sirven en botellas de 50 cl, muy frías, con un vaso o jarra helada, de estas que ya se ven cada vez menos en los bares. Sólo por esto ya merece la pena el sitio.
Pero hay más, el precio. Cada botella de 50 cl tiene un precio fuera de mercado hoy en día, 2,5 euros. Me pareció de lo más barato para estos barrios en los que vivimos.
Aún más si vas de cervezas, por cada ronda te ponen una tapa de carne que está muy buena.
¿Qué comer?
En este sentido también me sorprendí un poco, ya que además del típico kebab, que los hay, hay platos para compartir de lo más curioso. Por ejemplo, nosotros compartimos un combo de patatas (dos cuencos grandes), un cuenco de carne de cordero, otro de carne de cerdo, al tipo kebab (en tiras finas y con el sabor y la salsa típica) y otro cuenco de arroz blanco, todo ello con un buen pan de pita. Estaba muy bueno.
Hay más combos de este tipo combinando varios tipos de carne, patatas, arroz e incluso ensaladas. Además hay raciones más típicas, como un plato muy abundante de patatas fritas, por ejemplo.
En fin, no estamos hablando de un restaurante de estrella Michelin, pero para tomar una buena cerveza distinta a lo que estamos acostumbrados y algo de picar, está muy bien y os lo recomiendo.
Sin más, espero que haya sido de vuestro interés.
Hasta el siguiente post!